La importancia de un lenguaje como el audiovisual, que con el que convivimos las 24 horas del día, así como la necesidad de extender su alfabetización dentro de los artistas, es algo completamente necesario.
¡Somos analfabetos! Parece una afirmación muy rotunda y exagerada cuando las tasas de alfabetización en España son del 98,8% según la UNESCO.
Obviamente no nos referimos a leer y escribir cuando hablamos de analfabetismo, sino al lenguaje que es soslayado de forma reiterada: el audiovisual, al que estamos expuestos las 24 horas del día. Más que a cualquier otro de cuantos nos enseñan. Lo usamos al abrir los ojos, y también cuando dormimos. Nos transmite mensajes, nos educa, nos condiciona, nos persuade, nos entretiene, nos permite transmitir a los demás porque nos emociona…
El lenguaje audiovisual son imágenes y sonidos que están presentes en el cine, la televisión, internet, publicidad, videojuegos… y, como decíamos antes, también es el “material de los sueños”.
No es una figura retórica, no es una metáfora, ni una hipérbole exagerando la importancia del cine. Es que los sueños, nuestros sueños (y dejando aparte la parte bioquímica o su función biológica) están “hechos” de imágenes y sonidos. Y nuestra forma de soñar está muy influida por nuestra cultura y el consumo de imágenes que hacemos.
Por eso, dentro del Proyecto ‘Desarrollarte para innovar- Plataforma-Centro de recursos desde el Arte y la Metodología MUS-E Online, que desarrolla la FYME en el marco de su acuerdo establecido con el Ministerio de Cultura y Deporte, subrayamos y resaltamos el valor y la fuerza del mensaje audiovisual, así como la importancia de su alfabetización.
El audiovisual es un lenguaje extremadamente poderoso por varios motivos:
- Es relativamente fácil de entender. Lo cual no implica que sea fácilmente decodificable. Pero sí, en cualquier parte del mundo puedes comunicarte con imágenes o gestos sin conocer el idioma.
- Es universal. Salvo pequeñas diferencias culturales las imágenes y los sonidos suelen tener significados coincidentes. La prueba la tenemos en los emoticonos, imágenes que reflejan nuestro estado de ánimo virtual y que cualquiera entiende.
- Apela a las emociones. Una película, una imagen o una música no sólo nos gustan. También nos provoca una emoción. Nos crea un sentimiento que hace que la recordemos por tanto…
- Está conectado con la memoria. Nos ayuda a recordar. Hay multitud de estudios y experimentos con personas aquejadas de Alzheimer que han revelado que una música, por ejemplo, puede despertar un recuerdo de la memoria a largo plazo.
Promover la alfabetización audiovisual entre los artistas, para que utilicen los medios audiovisuales como herramienta habitual de trabajo, es algo necesario. El vídeo como herramienta pedagógica, no sólo desde una perspectiva teórica sino también eminentemente práctica en la que el artista aprende cómo y, sobre todo, por qué se realizan determinados elementos del código audiovisual (narrativa, realización, técnicas…). El objetivo último es que aprendan este lenguaje como si de un idioma se tratase.
Este trabajo hacia la alfabetización audiovisual ha nacido de la necesidad detectada por la crisis sanitaria de la COVID-19, que ha supuesto un cambio de paradigma y ha implicado la necesidad de otros modelos de comunicación, expresión y creación. Las nuevas tecnologías han venido para quedarse y se hace necesaria la capacitación real del sector cultural, lo que implica un reto repleto de dificultades, unas de índole técnica y las más acuciantes, de formación de los artistas.
Esta situación que la COVID-19 ha puesto en evidencia no es algo nuevo, y el sector ya arrastraba un fuerte déficit el cual es necesario solventar, sobre todo en algunos perfiles y tipología de artistas.
El Proyecto ‘Desarrollarte para innovar- Plataforma-Centro de recursos desde el Arte y la Metodología MUS-E Online se enfoca a conseguir el objetivo indicado en la propia resolución de la convocatoria : “El objetivo que se persigue es poder ofrecer productos y servicios culturales mediante nuevas tecnologías, impulsar la creación y difusión de la oferta cultural, formar gestores y emprendedores culturales, apoyar la creación y consolidación de empresas culturales y creativas, contribuir a la generación de empleo, favorecer la internacionalización del sector, y fomentar la participación y capacidad de decisión de los particulares y empresas en actividades culturales a través del mecenazgo”.
El Proyecto tendrá una dimensión nacional, participarán artistas de al menos 12 Comunidades Autónomas, pero también una dimensión internacional, por la presencia de la FYME en una red internacional en 11 países, además de otras redes complementarias en las que participa a través de proyectos europeos: beneficiarios, artistas, entidades culturales, cooperativas de artistas, formadores del campo de las artes. Queremos así capacitar a 150 profesionales de forma directa, representados de al menos 12 Comunidades Autónomas.
‘Desarrollarte para innovar’ está enmarcado en una actividad subvencionada por el Ministerio de Cultura y Deporte.